Tras el descenso de la población de nutrias que duró casi todo el siglo pasado, el animal desapareció gradualmente del norte y del centro de Italia, hasta que fue declarado extinto en Abruzzo en 1982. Después de esta fecha, de hecho, no se había encontrado ninguna señal de su presencia por casi 20 años, hasta la primera década del 2000, cuando la nutria regresó a nadar en el río Sangro.
Arriba se muestra la situación en la cuenca del Sangro nel 2004 con una sóla detección positiva que demuestra la presencia de la especie.
El projecto Lontrack comenzó en el 2010 con el objetivo de investigar la situación de la población de nutrias en el límite norte de su expansión desde el sur de Italia.
En el año 2012 se realizó un nuevo estudio en toda la cuenca del Sangro, la cual resultó casi completamente colonizada.
Los tres años de investigación 2010-2013 mostraron que a lo largo del río Sangro y su afluente principal, el río Aventino, se encuentra permanentemente una población de al menos 14 nutrias, 8 machos, 4 hembras y 2 individuos de los cuales no sabemos el sexo, divididos en 4 grupos familiares.
A lo largo de los 122 km que separan a la fuente de la desembocadura en el Mar Adriático, el Sangro es interrumpido por diversas presas. Las dos mas importantes son la de Bomba y la de Barrea, cada una de las cuales forma el lago homónimo.
Las dos presas son morfológicamente muy diferentes y parecen tener diferentes efectos sobre las especies acuáticas. De hecho, mientras que el Lago de Bomba ha alojado en varias ocasiones por los menos 5 nutrias (de dos grupos familiares diferentes), a pesar de los esfuerzos de muestreo repetidos, ningun rastro de la presencia de la especie fue encontrado aguas arriba de la presa de Barrea.
De esta manera, el rio Sangro es habitado a lo largo de los 64 km entre la presa de Barrea y la confluencia con el río Aventino, por al menos 14 nutrias que apartenecen al menos a cuatro grupos familiares como se ilustra abajo.